lunes, 21 de febrero de 2011

Fisioterapia en rapaces

A una persona le cuesta 30 euros cada sesión. Las aves del centro BRINZAL, en cambio, no pagan por el tratamiento. Y eso que a veces se quejan del manoseo.

Hace un par de años, una hembra de búho real fue víctima de un atropello; entró con una parálisis casi total de sus extremidades inferiores en el Centro Especializado en Rapaces Nocturnas BRINZAL. Incapaz de sostenerse sobre sus alas, su pronóstico era grave. A las sesiones de acupuntura y homeopatía que se le proporcionaron al animal, Antonio Agudo, fisioterapeuta voluntario de la ONG, añadió su esfuerzo y destreza. Tal combinación consiguió que el ejemplar empezara a abrir y cerrar sus garras y que se pusiera de pie y volara con el paso del tiempo. «Finalmente se le pudo devolver a la naturaleza. Fue muy gratificante para todos», comenta Agudo. 

Las aves heridas que ingresan en el centro reciben un concienzudo primer examen: pruebas hematológicas y radiográficas, análisis de las heces para descubrir la presencia de parásitos internos, fluidoterapia para combatir la deshidratación y cobertura antibiótica para calmar el dolor que sienten, pero que no pueden exteriorizar de la misma forma que lo haría un humano. El segundo paso implica o bien una cirugía, en el caso de la fractura de algún hueso, o bien la curación de las heridas detectadas. La labor de rehabilitación de Agudo llega tras el periodo de inactividad de sus miembros, inmovilizados con agujas intramedulares, fijadores externos o vendajes que, en algunos casos, las aves portan hasta 35 días. «A través de estiramientos y movilizaciones ayudamos a recuperar la función del ala, la pata, la clavícula…. También utilizamos ultrasonidos o láser para acelerar la curación. Por lo general, la frecuencia de los tratamientos de fisioterapia nunca supera las dos veces por semana y suelen durar unos 15 minutos», explica Agudo.

La manipulación estresa mucho a los animales; situación muy negativa para ellos, puesto que sus defensas bajan. «La especie que se comporta de forma más violenta, curiosamente, es la más pequeña en tamaño: el autillo no para de revolverse. Los mochuelos, en cambio, permanecen más quietos, fingiéndose muertos, aunque en su interior están asustados», afirma Agudo. 

Aves irrecuperables

El miedo, de hecho, es una buena señal. Las rapaces que no temen a los cuidadores de BRINZAL tienen pocas posibilidades de ser liberadas. Los problemas psicológicos, aquellos que impiden a estos ejemplares identificarse con la imagen de su orden en presencia de un espejo o de otro animal, momento en el que deberían actuar de manera agresiva o asustadiza, no son los únicos motivos que hacen «irrecuperable» a un ave. La capacidad de vuelo incompleta –porque no haya sanado bien un traumatismo, por ejemplo- o la falta de un oído son otras dos causas. «Si les falta uno de los ojos pierden parte de la visión tridimensional, pero no les afecta a la hora de cazar», señala Patricia Orejas, responsable del centro.

«Toda la documentación sobre fisioterapia en fauna salvaje escrita en castellano trata sobre perros, gatos o caballos. Aunque hemos encontrado datos útiles en inglés. El resto del trabajo radica en conocer la anatomía del ave y tratar de adaptarle las técnicas que aplicaríamos en personas», lamenta Agudo.

El búho (real, chico y campestre), el cárabo, la lechuza, el mochuelo, el autillo, el chotacabras (pardo y gris) y el aguilucho (cenizo y pálido) disfrutan de instalaciones exteriores adecuadas a su tamaño en las que ejercitarse antes de regresar a su hábitat natural.

Búholviendo a la Naturaleza

Los pollos levantones son inquilinos asiduos de BRINZAL. «Algunos particulares bienintencionados, creyéndolos huérfanos o abandonados, logran criarlos en casa como una mascota. Sin embargo, lo mejor es reintegrarlos al cuidado de los padres; basta con dejarlos en una rama o escondidos por los alrededores», indica Orejas.

El centro cuenta con parejas cautivas muy experimentadas a la hora de sacar adelante pollos ajenos. Cuando éstos alcanzan la edad apropiada para abandonar el tutelaje acaban formando parte de programas de reintroducción o reforzamiento de su especie en determinadas áreas o siendo puestos en libertad mediante hacking (crianza campestre que establece una dependencia entre los individuos y el lugar de suelta, al menos durante un periodo crítico de su existencia). 

Gran poder de curación

El organismo humano produce más de 30 sustancias que intervienen en complejas reacciones químicas que conducen a la autocuración de numerosos procesos patológicos. Si cada vez que padecemos un trastorno nos medicamos, no damos lugar a que nuestro cuerpo trate de solucionar el daño. Los animales salvajes no ingieren medicamentos; su cuerpo no inhibe ni atrofia por el desuso su capacidad de autocuración, y tardan menos tiempo en sanar, asegura el fisioterapeuta Antonio Agudo. «Las aves no tienen conciencia del dolor de sus lesiones como podemos tenerla nosotros; además, su metabolismo es muy rápido», añade Patricia Orejas, responsable del Centro Especializado en Rapaces Nocturnas BRINZAL.

Video

http://www.youtube.com/watch?v=M1gl7yuYHnc&feature=player_embedded  

Mariam Zambrano
Electrónica del Estado Solido

jueves, 3 de febrero de 2011

Las heces de las aves perjudican a alcornoques centenarios de Doñana

 

   La salud de los alcornoques que conforman la colonia de nidificación de aves zancudas de Doñana, conocida como la pajarera, se está viendo afectada por los excrementos de sus moradores, según refleja un estudio publicado en la revista Biological Conservation, liderado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

   Los investigadores han hallado que los suelos bajo los ejemplares de alcornoque con mayor presencia de aves, muchos de ellos centenarios, tienen una mayor concentración de nitratos y fosfatos, procedentes de los excrementos de las aves. Esa modificación en la salinidad del suelo puede afectar tanto al proceso de fotosíntesis como al uso eficiente del agua por parte de los alcornoques, provocando así la desecación de estos árboles.

   Según ha explicado el investigador del CSIC Luis Ventura García, del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla, "el alcornoque puede pasar de ser la especie arbórea dominante en amplias zonas de las arenas estabilizadas de Doñana a estar en peligro de desaparición". "La acción humana hasta mediados del siglo pasado y la exhaustiva depredación de bellotas, por la elevada carga de herbívoros existente en la zona, ha diezmado a los alcornoques y los condena a morir", ha indicado.

   Año tras año, cientos o miles de aves zancudas, dependiendo de las condiciones de inundación de la marisma, construyen sus nidos sobre los alcornoques, acebuches, álamos y sauces que se alinean a lo largo de la Vera, la zona de contacto entre las arenas y la marisma y la cantidad de excrementos que estas aves originan, "se ha convertido en una amenaza para estos árboles, sobre todo para los escasos alcornoques centenarios, verdaderos monumentos naturales", ha aclarado investigadora del CSIC Cristina Ramo, de la Estación Biológica de Doñana.

   Según los investigadores, la situación plantea un reto para la gestión de la reserva, ya que por un lado la pajarera cumple un importante rol ecológico como enclave que permite reproducción de siete especies protegidas de aves zancudas, pero a su vez esas mismas aves, con sus excrementos, están poniendo en peligro la salud de los alcornoques que les dan soporte y que además también forman parte de la biodiversidad del espacio natural.

   El equipo ha constatado que problemas similares se han producido en otras reservas naturales europeas, como es el caso de Polonia, donde el éxito en la conservación y crecimiento de aves, al igual que ocurre en Doñana, pone en peligro la supervivencia de árboles centenarios. También se ha registrado que en ciertos espacios naturales de Sudáfrica los elefantes protegidos destruyen árboles a su paso; al igual que las gamuzas de los pirineos se alimentan de plantas medicinales que también se encuentran en peligro.

   La protección de una especie animal o el aumento en su número gracias a la puesta en práctica de medidas de conservación, puede producir tensiones ecológicas sobre aquellas especies vegetales que les sirven de soporte, bien como alimento o cobijo. "Los gestores tienen que estar preparados para asumir cambios en las prioridades de conservación si se produce un crecimiento desequilibrado de algunas especies, que podrían pasar de estar amenazadas a representar una amenaza", ha indicado García.

   En el caso particular de Doñana, una de las medidas a considerar es la recolocación de la colonia a otro emplazamiento donde la vegetación sea menos valiosa y más fácil de reponer, pero el número de parejas de aves es tan grande que significaría un considerable reto de gestión para los responsables de la reserva.

http://www.europapress.es/sociedad/medio-ambiente-00647/noticia-heces-aves-perjudican-alcornoques-centenarios-donana-20110203124608.html

Mariam Zambrano
Electrónica del Estado Solido

 

Donde nacen las aves

 

La Cañada de los Pájaros soltó fochas cornudas y cercetas pardillas en el Día de los Humedales.

La celebración del Día de los Humedales sirvió de excusa para pasar en la Cañada de los Pájaros un día de fiesta en el que por cuarto año consecutivo se procedió a la suelta de fochas cornudas y cercetas pardillas, más de un centenar de cada especie de estas aves en peligro de extinción para las que este paraje, en el término municipal de La Puebla del Río, es su lugar de cría.
 
"Llevamos 20 años criando la focha cornuda en cautividad", señaló el director del centro, Plácido Rodríguez, quien explicó el proceso: "Tenemos parejas reproductoras, luego los huevos los ponemos en incubadoras y en vez de soltar los pollos cuando sería el momento lo hacemos cuando ha acabado la temporada de caza, coincidiendo con el 2 de febrero".

Más de 200 aves aguardaban a pocos metros de la orilla a que llegara el momento de llegar al agua. La lluvia caída este año, hasta ahora más pausada que en el invierno anterior, puede permitir en primavera que sea un buen año para la cría "pero hasta ahora no hay más aves que otros años", destacó el director.

Maribel Adrián, bióloga y gerente de la Cañada de los Pájaros, afirmó al respecto que "si llueve mucho se acumula demasiada agua y las aves no tienen sitio para criar en Doñana". Sin embargo, el problema en esta reserva natural es que, aunque hay menos agua y está mejor la laguna está colmatada de sedimentos, por tanto cabe menos y dura menos en verano cuando es fundamental para las poblaciones de las fochas cornudas. De igual modo, es necesario vaciar la laguna para sacar los sedimentos, "un gasto y un trastorno para las aves". Hace tiempo se hacía cada década "y ahora habría que hacerlo cada año, pero no se puede", según la gerente de esta reserva natural privada y concertada.

Las aves que liberaron en la Cañada de los Pájaros y que nacieron la primavera pasada "se sueltan aquí para que cuando en verano se seque el agua de la marisma regresen a pasar la temporada estival y el otoño", detalló el director. Y es que, algunas de las que se soltaron "y que están en buenas condiciones" empezarán a marcharse ya. "Se reparten por toda Andalucía e incluso algunas llegarán a Galicia atravesando Portugal, y vuelven", afirmó al respecto.
 
Por otra parte, la gerente del paraje natural reclamó a las administraciones "un compromiso real y que hagan cumplir las leyes europeas". Denunció, al respecto, la situación que se da con una laguna "situada justo tras la valla a cuyos propietarios han permitido cubrirla con escombros, y eso que estamos en un paraje incluido en la Red Natura 2000 y un área de dispersión de lince". Denunció también que "no se controlan actuaciones ilegales y cada vez va a peor". Este hecho, señaló: "Ha llegado a Bruselas, los grupos ecologistas y de protección de las aves, como SEO, Ecologistas en Acción y Adena, nos apoyan y estamos recogiendo firmas".

En la actualidad, y pese a los esfuerzos realizados en estos 20 años las aves, siguen en peligro crítico de extinción. "La focha cornuda, si no fuera por nuestros programas de cría se habría extinguido hace tiempo", destacó. Éste es el año en que más ejemplares se han soltado. Desde que comenzó el programa de cría en la reserva se han liberado 700 ejemplares de focha cornuda y 400 de cercetas pardillas.

La jornada soleada de este miércoles invitaba a hacer el recorrido por el sendero que rodea el recinto de la primera reserva natural concertada de España. La visita permite ver a pocos metros de distancia gran cantidad de aves: cigüeñas, flamencos, ánsares... En este sentido, por las instalaciones se encontraban contemplándolas dos excursiones de escolares y un grupo de mayores que aprovecharon la jornada para visitar también Dehesa de Abajo. 

http://www.elcorreoweb.es/sevilla/gransevilla/115059/nacen/aves

Mariam Zambrano
Electrónica del Estado Solido